El 5 de julio se inaugura en Corchia, un pequeño pueblo de los Apeninos de Parma, una exposición temporal de las pinturas de Martino Jasoni (1901-1957), un artista aislado y poco conocido, de gran sensibilidad y fuerza expresiva. La exposición estará abierta hasta octubre, todos los sábados y domingos de 10 a 12 y de 17 a 19. Del 1 al 17 de agosto, la apertura se ampliará a todos los días de 17 a 19 horas.
La exposición cuenta el tema del regreso de la emigración a través de la biografía de Jasoni, quien se fue a Nueva York a la edad de 6 años con su familia. En la metrópoli estadounidense estudió y cultivó su pasión por la pintura, hasta que maduró el sueño de convertirse en artista. Después de 17 años, Jasoni regresa a su ciudad natal, Corchia, trayendo consigo no solo técnicas e inspiraciones, sino también una experiencia compleja hecha de transformaciones interiores.
A través de pinturas, dibujos, escritos y diarios, la exposición ofrece una mirada íntima a la experiencia de la emigración y el retorno. No se trata solo de un movimiento geográfico, sino de un verdadero viaje existencial, donde la identidad y la memoria se confrontan y se recomponen. La narración se vuelve universal: la historia personal de Martino Jasoni se refleja en la de muchos emigrantes, entre salidas forzadas, esperanzas, nuevas raíces y regresos inesperados.
Una exposición que combina arte e historia, y que nos invita a reflexionar sobre el valor del retorno como proceso humano y colectivo.