La historia de Emilia-Romaña está notoriamente entrelazada con una tradición mecánica y automovilística muy fuerte.
¿Cómo surgió? Originalmente tierra de agricultores, la región se ha convertido en un icono de la industria automotriz gracias a los desarrollos tecnológicos que han afectado al mundo de la agricultura y el transporte por carretera durante el siglo XX. Las nuevas máquinas agrícolas comenzaron a estimular la imaginación y la practicidad de los agricultores de Emilia-Romaña, acercándolos al mundo de la mecánica; Muchos de ellos se reinventaron entonces como mecánicos y a partir de aquí iniciaron una tradición que se ha desarrollado a lo largo del último siglo, dando origen a empresas destinadas a marcar la historia de la ingeniería automotriz internacional.
Estas empresas nacieron del ingenio y la iniciativa de nombres que se han convertido en protagonistas en la historia del automovilismo italiano y mundial: Gian Paolo Dallara, Enzo Ferrari, los hermanos Maserati, Horacio Pagani (ítalo-argentino), Ferruccio Lamborghini, Antonio Cavalieri Ducati y Giorgio Tazzari. La Tierra de los Motores, ahora llamada Motor Valley, es la expresión contemporánea de este patrimonio territorial y cultural de valor incalculable
Gracias a estos visionarios, los entusiastas de las cuatro ruedas ahora pueden disfrutar de una experiencia emocionante visitando las sedes históricas y las fábricas de los gigantes automotrices. Muchas empresas del Valle del Motor ofrecen visitas exclusivas a sus fábricas, donde cada una cuenta su propia historia.
Para un viajero de raíces, que descubre sus orígenes en la Romaña, el Valle del Motor no solo significa vehículos de lujo, sino también conexión con la rica historia cultural de la industria automotriz italiana. Es más que un viaje a través de la historia del automóvil, sino una profunda conexión con las raíces culturales, la tradición artesanal y la innovación que han llevado a Emilia-Romaña a un lugar único en todo el mundo.